En una semana, justo a nueve días del balotaje presidencial entre Sergio Massa y Javier Milei, se dará a conocer el último dato necesario para activar el próximo incremento de las jubilaciones, la Asignación Universal por Hijo (AUH) y otras prestaciones que la ANSES comienza a abonar a partir del 1° de diciembre.

De acuerdo con cálculos de entidades privadas, el aumento se estima alrededor del 25%, situando el haber mínimo cerca de los $109.000, sin incluir los bonos extraordinarios que el Gobierno considera otorgar, ya que la nueva cifra quedaría debajo de los $124.000 que se perciben este mes (sumando el haber y el adicional de $37.000 mensuales) en un escenario de alta inflación y decisiones electorales críticas.

Tanto el cerdo en pie, como la media res porcina tuvieron alzas inferiores a la inflación, pero “el precio al público pegó un salto que uno puede aseverar que no sucedió en los últimos 20 años: un 35% en un mes”, señaló Uccelli.

El experto explicó que la cotización de los cortes porcinos, que habían experimentado una variación inferior a la inflación de agosto y septiembre, pegó un salto en octubre que, sumado al atraso del tipo de cambio oficial, encareció fuertemente el valor dolarizado al público.

De este modo, el capón alcanzó la cotización más alta en dólares de todo este año. 
 
“El valor es un 10.6% más que en septiembre y 4.4% menos que el mismo mes del 2022?, detalló Uccelli.


Respecto al encarecimiento de la carne porcina, Uccelli consideró: “Es una barbaridad, más allá que en agosto y septiembre el aumento subió por debajo del cerdo en pie, pero tomando los 3 meses, la diferencia a favor del precio al público tuvo un alza superior al 16,5%”.

El aumento del precio de la carne vacuna al público arrastró el del cerdo, pero la diferencia es mucho mayor a favor de la media res porcina, que un año atrás.

La media res vacuna y el pollo eviscerado evolucionaron casi paralelamente mientras que la media res porcina siguió un camino propio.

“A pesar de la suba del cerdo en pie, el fuerte salto del valor al público desmadró la relación llegando a valores superiores al promedio y que no se observaban desde hace 6 o 7 años”, señaló Uccelli.

Según el consultor, “el corte del jamón tuvo un aumento muy grosero, seguido del índice y del pechito, luego el maíz, el vacuno, la soja, el capón y el dólar que no mostró cambios”.

En lo que va del año, el alza de precios fue muy importante tanto para la soja como para el corte del jamón, superando el 200%. Le siguen el vacuno, los cortes de cerdo, el maíz, el dólar y el valor del capón en pie.

“Tuvimos dos meses de mayor aumento del cerdo en pie que los precios al público, pero en octubre estos últimos subieron mucho y marcaron una gran diferencia. En tres meses la diferencia se aumentó un 16.5% que es demasiado para nuestra realidad de país”, dijo Uccelli.

Los productores con menor margen

La nueva actualización del precio del maíz y de la soja a un dólar más competitivo (Programa de Incremento Exportador) y la limitaciones para la importación de insumos necesarios para la producción elevaron los costos, bajando el margen bruto en dólares.

“Sabemos que esta situación es complicadísima para los productores de baja escala”, lamentó Uccelli.

“A los productores se les aumenta el valor de los cereales por un nuevo dólar y su cerdo, a pesar de subir, no tiene el mismo resultado. Esto provoca, en el mejor de los escenarios, una baja en el margen bruto y para muchos pequeños productores una complicación muy seria de rojo en las cuentas”, advirtió Uccelli.

A esto, se agrega la menor venta de maíz y soja de los agricultores por la incertidumbre reinante.

“Considerando que el gobierno que sea electo realizará indefectiblemente una devaluación, parte de la misma la están pagando los productores cuando compran el maíz y la soja con un dólar mucho más alto que el oficial. Parte del golpe bajo de la devaluación, los productores de cerdo lo están pagando hoy”, sostuvo el consultor.
 

La influencia de la carne vacuna

La variación en los cortes porcinos se relaciona con la suba del precio de la carne bovina en el mostrador que, si bien no creció en ese porcentaje, venía en alza los últimos tres meses.

“La carne de cerdo se acomodó, o mejor dicho, la acomodaron, manteniendo una diferencia del 20% al 30% más barata que el vacuno, estando cerca del pollo”, dijo Uccelli.

Es que el precio al público lo maneja la relación con la carne vacuna y no con el valor del cerdo en pie.

“Esta situación desmadró la relación cerdo en pie con el Índice Carne de Cerdo que superó el promedio histórico de 3.08 y llegó a 3.18. Deberá normalizarse en poco tiempo, recordando que estábamos los últimos dos años en una relación de 2.6 a 2.8?, explicó.
 

“Estar produciendo sin saber si mañana los cerdos podrán tener alimento balanceado, si la aplicación del inmunocastrador la podremos hacer, después de tener un cachorro sin castrar y muchas otras cosas, en la lógica es imposible”, afirmó Uccelli.

No obstante, agregó: “Los productores porcinos de Argentina siguen produciendo e increíblemente, siguen invirtiendo y para algunos sigue siendo rentable”

Asimismo, señaló que el sector deberá “volver a negociar con las nuevas autoridades que asuman en diciembre, mostrando las virtudes de generar ruralidad, dar valor a los cereales, reemplazar la carne vacuna que faltará y hasta divisas mediante la exportación de carnes porcina, subproductos y productos elaborados”.