La importancia vital de controlar las instalaciones de artefactos de gas y mantener ambientes ventilados. Prácticas que implican riesgo de intoxicaciones por monóxido de carbono.    

Estamos a días del inicio oficial del invierno, pero los fríos han llegado. Queremos tomar una ducha caliente o tener un ambiente climatizado acorde a nuestras necesidades. No obstante, hay cuidados que conviene tener presente.

La jefa del servicio de Neumonología del hospital Dr. Ángel C. Padilla, Rosa Isabel Amaya, habló respecto a que, en la época de fríos, es frecuente el uso de braseros, encendido de hornallas y hornos para calentar los ambientes de los hogares; prácticas que pueden acarrear el riesgo de intoxicaciones por monóxido de carbono.     Para aclarar el asunto,  la profesional explicó que el monóxido de carbono es un gas que se produce por la combustión de diferentes sustancias como madera, carbón o gas.

“Todo equipo o aparato que no se encuentre en condiciones óptimas puede generar este gas que es muy peligroso, especialmente el carbón cuando no está totalmente encendido y no completa la combustión usándose en espacios cerrados, genera que este gas que no tiene olor ni color,  se difunda y uno no sepa que lo está inhalando”, describió.

Cómo prevenir la intoxicación con monóxido de carbono
El uso de braseros puede implicar un riesgo de intoxicación por monóxido de carbono.    

Cuando el gas ingresa al organismo, reemplaza rápidamente al oxígeno en la hemoglobina en sangre y en lugar de trasladar ese oxígeno a los tejidos, la sangre traslada dióxido de carbono, el cual es tóxico y puede incluso producir la muerte.

“Al comienzo provoca un daño en forma lenta, pero al permanecer en un espacio cerrado la persona puede incluso fallecer, esto es algo que lamentablemente ocurrió en muchas oportunidades. Debemos evitar el daño de tejidos y las muertes, por eso se aconseja mantener los espacios abiertos y no tener calefactores que funcionen mal o braseros o parrillas mal encendidos”, explicó la doctora Amaya.

¿Cómo se puede percibir que alguien ha sido afectado por monóxido de carbono?

Mareos, náuseas, vómitos, cefaleas muy intensas son algunos de los síntomas que la persona que se está intoxicando con monóxido de carbono puede sentir inicialmente y mientras está consciente.

 “Cuando la persona está dormida no puede percibir los síntomas y puede ocurrir lo peor. Por eso cuando se inicia con estos y se toma conciencia, se deben abrir inmediatamente las ventanas y puertas y salir del espacio o si la persona es encontrada inconsciente debe ser trasladada inmediatamente a un centro de salud donde pueda ser asistida”, exhortó Isabel Amaya.

¿Qué se puede hacer para no ser víctima de tan peligroso enemigo en época invernal?

La prevención ante este tipo de problemáticas es por excelencia la ventilación y la circulación de aire limpio y puro que no contenga partículas de este nocivo gas.

Cómo prevenir la intoxicación con monóxido de carbono
Los calefactores solo deben ser revisados por profesionales matriculados.

El humo de incendios, las quemas de basura o cañaverales también son altamente peligrosas, ya que está comprobado que si una persona se encuentra en medio de un incendio puede correr riesgo su vida.

“Los calefactores solo deben ser revisados por profesionales matriculados, que constaten la quema correcta, ya que si realmente el equipo se encuentra en mal funcionamiento será difícil evitar el accidente en espacios cerrados”, finalizó.