El equipo económico que lidera el futuro titular del Palacio de Hacienda, Luis Caputo, se prepara para anunciar -no hay definición de cuándo- las primeras medidas económicas con fuerte foco en un ajuste fiscal, una suba del dólar oficial a $650 y una promesa de cerrar la canilla de la emisión monetaria del Banco Central (BCRA).

“El plan es fiscalista”, calificaron y agregaron: “La hoja de ruta es brutalmente ortodoxa”.

En un primer momento, en La Libertad Avanza (LLA) afirmaron que el primer paquete de anuncios se haría el lunes a las 8 en el Palacio de Hacienda, antes de la apertura de los mercados. Lo confirmó el vocero presidencial Manuel Adorni. Sin embargo, el equipo que dirige Caputo está todavía ajustando detalles. Cerca del ministro estimaron que no se anunciarían mañana. No definieron cuándo.

Como primeros anuncios señalaron que buscarán conocer profundamente el detalle de las partidas presupuestarias trabajando línea por línea.

En ese sentido, aclararon que tomarán medidas que no requieran del Congreso para reducir el rojo fiscal en 5,5 puntos del PBI.

El presidente Javier Milei ya había dicho que no habrá dinero para la obra pública -se buscará un modelo a la chilena con iniciativa privada- y, se estima, que se prorrogue el presupuesto 2023, lo que implicaría una fuerte reducción de los fondos que recibirán los gobernadores de distintas provincias.

Afirmaron que no se hará nada en el corto plazo con las Leliq, pero aseguraron que se cortará el financiamiento al Tesoro desde el BCRA.

En el equipo estimaron que un dólar a $650 está bien, que no habrá fondos frescos ni misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) en el corto plazo. Sí podría traccionar algo el Banco Mundial (BM), cuyos funcionarios estuvieron en el país esta semana.

El valor del dólar a $650 era el que había avalado el ministro de Interior, Guillermo Francos, días atrás.

“Nos vamos a enfocar en el tema fiscal”, señalaron desde LLA.

“El corazón de este programa es fiscal”, agregaron y describieron que “la Argentina vive 100 años de desastres económicos”. En el equipo de Caputo calificaron al camino que emprenderán como un “programa de transición”.

“¿Cómo se financia el déficit?”, se preguntaron. “Los gobiernos fueron adictos al déficit. La Argentina va al equilibrio fiscal. En un año tendremos resultados”, dijeron sobre el ritmo y la profundidad del ajuste, que será, lo confirmó hoy el Presidente, de shock. “La sintonía con Javier Milei, al que Caputo no conocía, es total porque los dos comparten el combate al déficit fiscal”, agregaron cerca del ministro.

“La gente cree que la inflación o la deuda externa son el problema de la Argentina. El verdadero problema es el déficit y vamos a trabajar para llevarlo al equilibrio. Buscamos reducir el déficit a cero en un año. Llegar al superávit primario en un año. Vamos a reducir el déficit de 5,5 del PBI (unos U$S25.000 millones) a 0?, agregaron desde el equipo económico que lidera Caputo.

La inflación terminará este año cerca de 200%, la más elevada en más de tres décadas, mientras que la emisión para cubrir el rojo fiscal primario (que se estima en 3,5 puntos del PBI) fue cercana a 6 puntos de producto, según analistas privados. En medio de una fuerte sequía y con una sumatoria de parches en la política económica para sostener el “Plan Platita” durante la campaña electoral, la economía terminará en recesión.

En ese marco, con más de 40% de pobres en la Argentina, con más de tres de cada 10 ocupados por debajo de la línea de pobreza y con ingresos cayendo hace seis años, el gran desafío de Milei y el equipo de Caputo es alinear precios relativos (dólar y tarifas) y ajustar el rojo sin mayorías en el Congreso y evitando que la conflictividad social escale en los meses en que se llevará a cabo la “estabilización”.

En ese sentido, aclararon que la Argentina no tiene más financiamiento.

“Entendemos que esto va a ser duro, pero lo otro sería mucho peor, ya está demostrado. Este modelo deficitario ha llenado de pobreza y distorsiones a la Argentina. El presidente Javier Milei tiene el mandato de la sociedad para arreglar esto y habrá que hacer ajustes. Vamos a hacer lo que hay que hacer. No hacerlo es mucho peor”, contaron. “La Argentina no tiene institucionalidad y la mirada exterior es demoledora: no nos creen nada”, agregaron.

El futuro del Banco Central

Sobre la deuda remunerada del BCRA, que llega entre Leliq y pases a $23 billones, aseguraron que se trata de “un tema central”, pero aclararon que será materia de la entidad que conducirá Santiago Bausili. La semana pasada, el FMI advirtió que es clave reconstruir la credibilidad del banco que conducía Miguel Pesce. “Al Central no le vamos a pedir más plata ni que nos financie; necesitamos reconstruir la hoja del balance del BCRA”, advirtieron desde el equipo económico que dirige Caputo.

Allí consideran que los banqueros nacionales se quedaron conformes con la reunión que mantuvieron con Caputo semanas atrás. Los empresarios, dijeron, también. Caputo prometió entonces una “solución de mercado” para la deuda remunerada. Cerca del ministro designado dijeron que “hay cero reservas en el Banco Central” y que no habrá financiamiento para el déficit. Agregaron que apuntarán a recomponer reservas y aclararon que es probable que el nivel de divisas está ajustado hasta marzo, por lo menos.

Fuentes privadas estiman que el BCRA tiene reservas negativas por cerca de -US$11.000 millones. Por otra parte, la deuda comercial de las empresas se estiró este año unos US$30.000 millones.

“Vamos a recomponer reservas en 2024. Tenemos que reconstruir la relación con el FMI que ha quedado totalmente rota. El plan va a ser fiscalista; un plan motosierra. La hoja de ruta es brutalmente ortodoxa”, cerraron desde el equipo económico que desde mañana buscará cambiar la Argentina.

Fuente: La Nación