El mundo del fútbol todavía se está recuperando de la noticia que explotó el jueves pasado, cuando Barcelona publicó un comunicado en el que confirmaba que Lionel Messi no iba a renovar. Pocos minutos después llegaron los primeros rumores que indicaban que París Saint-Germain era el único club con la capacidad económica de seducir al 10.
Las negociaciones fueron rápidas y llegaron a buen puerto: el rosarino llegó este martes a Francia, se hizo la revisión médica y saludó a los hinchas desde el balcón del lujoso hotel en el que se hospedará junto a su familia hasta que se consigan una linda casa para vivir.
El objetivo del grupo que administra al club es ganar la Champions League por primera vez en su historia. Y tener a Messi sin dudas hace que las posibilidades crezcan considerablemente.
El vínculo del ex Barcelona lo ligará a su nuevo club por dos temporadas y con la opción personal de extenderlo por una más en el caso de que lo desee.
Es decir, Leo tendrá en 2023 una cláusula (de salida o continuidad) para definir si se queda otro año más. Cobrará, según anticipó el diario francés L’Equipe, 35 millones de euros por año.
Además, habrá extras por objetivos cumplidos, lo que llevará su salario muy por sobre el inicial. Si conquista la Champions, el premio económica será colosal.
