Este lunes Tucumán atraviesa su séptima jornada sin colectivos, luego que los choferes nucleados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA) decidieron el pasado martes suspender el servicio hasta que los empresarios abonen los sueldos de marzo.
Ante la magnitud del conflicto, que incluyó bloqueos en distintos puntos de la provincia a lo largo de cuatro jornadas, el Gobierno de la Provincia intervino el pasado viernes y afirmó que se encargaría de adelantar el pago de los subsidios nacionales y locales. Se trata de 256 millones de pesos con los que se abonarían los sueldos adeudados.
“Inyectamos fondos para el pago de los salarios que se hará efectivo el lunes: 110 millones adicionales a lo que ya se aporta la provincia, sumado los 146 millones de los subsidios nacionales. Esto permitirá el pago de los salarios de los trabajadores y las medidas se levantará cuando el dinero impacte en las cuentas”, expuso Carolina Vargas Aignasse, ministra de Gobierno y Justicia.
Ante la delicada situación que el Transporte Público atraviesa en la provincia, el secretario provincial de transporte, Benjamín Nieva, se refirió a la importancia de los subsidios para el sector, y la necesidad de un reparto más federal de los mismos.
“Desde Nación nos dijeron que están buscando hacer más federal el reparto del subsidio en el país. Hoy lo repartido no alcanza por la pandemia, en donde se cayó el corte del boleto. Depende de cada provincia o municipio cómo manejar el sistema de transporte”, afirmó el funcionario en una entrevista con el programa Café Prensa.
En ese sentido, señaló que en Tucumán las competencias están divididas, ya que la Provincia debe responder por las líneas interurbanas. “No sólo hay demora del pago de subsidios en Tucumán, además, varias empresas hacen cesiones a otras entidades por deudas que tienen. Están permitidas estas cesiones desde el gobierno nacional. Pero es bastante engorroso para la rendición de cuentas para aprobar la partida siguiente”, indicó Nieva.
“La reunión que convocamos para el miércoles a la mañana es para encarar un estudio de costos serio para saber cuánto cuesta un boleto realmente. Copiar un modelo no tiene mucho sentido, debemos ver cómo funciona Tucumán en base a los costos. No existen fórmulas mágicas”, agregó el titular del área haciendo referencia al proyecto impulsado por concejales de la Capital, que buscan imitar el modelo salteño.
Sobre el costo real del boleto, Nieva indicó que “un estudio de costos no puede arrojar menos de 80 o 90 pesos, pero sabemos que el usuario no lo puede pagar en ninguna parte del mundo”. “Para esto sirven los subsidios. Es un error subsidiar a la oferta solamente, pero hay que usar un modelo ecléctico que subsidie a la demanda”, finalizó.
Por su parte, el vicepresidente de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán, Jorge Berreta, explicó que “hay que analizar la metodología que se utiliza para evaluar el costo de transporte para blanquear el real costo”. “Hay que evaluar cuánto vale el pasaje primero. De ahí ver qué tipo de sistema se aplica”, ante los proyectos que buscan resolver la crisis del sector.
“El transporte público en Tucumán está en una debacle económica en la que nadie se hace responsable. Quien nos regula es la municipalidad o la provincia”, agregó el empresario
“La provincia nos brindó, no lo que necesitamos, pero si lo que nos ayuda para costear los salarios. El día miércoles nos reuniremos con el gobierno provincial para ver como seguimos”, cerró.
Fuente: eltucumano
