El fiscal Carlos Sale confirmó que el policía que el miércoles por la noche mató a dos delincuentes permanece en calidad de aprehendido hasta que se resuelva la investigación. El efectivo fue protagonista de un asalto donde además de los ladrones, lamentablemente falleció un joven de 21 años que junto a sus dos hermanos hacía gimnasia en la zona de avenida América y Paraguay.
El representante del Ministerio Público Fiscal confirmó que todos los disparos, unos 14 en total, fueron efectuados por el policía ya que se estableció que los delincuentes abatidos habrían tenido un arma de juguete.
Al respecto, Sale afirmó que esto no implica ningún atenuante en relación a la acción de los ladrones, ya que al momento del asalto el policía consideró que su vida corría peligro y no podría haber determinado que era una réplica de arma de fuego.
El fiscal indicó que los sujetos están identificados y que tendrían antecedentes policiales. Incluso, de acuerdo a los primeros testimonios recogidos tras el hecho, los vecinos indicaron que eran conocidos en la zona por su intensa actividad delictiva.
Tras excusarse de brindar más detalles del lamentable suceso, el fiscal Sale adelantó que en las próximas horas se resolverá la situación del policía y se tomará declaración testomonial a la hermana melliza del joven que murió mientas hacía actividad física. Lucas Fernando Delgado habría sido alcanzado por una bala a la altura del tórax, lo que le produjo la herida mortal prácticamente en el acto.
Todo sucedió cerca de las 21. Mientras esperaba que su pareja abandonara la peluquería en la que trabaja, un oficial de policía que estaba sentado en su moto, fue sorprendido por dos motochorros que pasaban por el lugar.
Uno de ellos se bajó del rodado en el que se desplazaban y, después de amenazarlo con un arma de fuego, le quitó sus pertenencias, no así su arma reglamentaria que la tenía escondida.
Los supuestos ladrones, cuando se escapaban, descubrieron que la víctima del robo era un efectivo de la fuerza. Según las primeras informaciones, uno de ellos arengó a su compañero para que disparara en contra del oficial que estaba de civil.
En esas circunstancias, temiendo por su vida, el policía dio la voz de alto y se inició un balacera (14 tiros en total), que terminó con la vida de los delincuentes, que tendrían unos 28 años, y que recibieron dos impactos de balas cada uno.
Fuente: Los Primeros